¿Qué debes revisar en tu bici antes de hacer una ruta larga?

Hacer viajes en bici es una experiencia extrema y muy divertida. Es ideal para hacer ejercicios y una perfecta ocasión para mantener contacto directo con la naturaleza y protegerla. Pero, antes de hacer una larga ruta en cualquier medio de transporte, en indispensable realizar una revisión previa, para asegurar el correcto funcionamiento y evitar accidentes fatales.

Por esta razón, hemos preparado una guía donde te explicaremos a detalle qué debes revisar en tu bici antes de hacer una ruta larga. Además, te dejaremos algunas recomendaciones para que tengas un viaje más placentero y lo disfrutes al máximo. 

Chequea tu bici antes de un recorrido largo 

Checar tu bici es algo que debes hacer habitualmente, sin importar que esta sea vieja o nueva, ya que de ella dependerá tu seguridad. A continuación, te mostramos lo que tienes que verificar antes de emprender ese recorrido que has soñado: 

Los neumáticos 

Sin los neumáticos no te podrás mover, así que antes de emprender tu viaje, realiza una revisión de estos. Verifica que no tengan agujeros, estén desgastados o presenten fugas. Igualmente, es importante que identifiques la cantidad de aire que tienen, si es suficiente o le falta, también, puedes apoyarte de alguna bomba con manómetro para establecer una presión adecuada. 

Las ruedas de tu bici deben funcionar adecuadamente, sin ruidos, movimientos o desnivelación; por lo tanto, verifica cómo están rodando. Si se presenta alguna situación extraña, solo debes voltear la bici y girar las ruedas con las manos para ver cómo están trabajando. 

Los frenos 

Revisar los frenos de tu bici antes de usarla es muy importante, porque este es el sistema que te brinda seguridad. Resulta bastante peligroso hacer la ruta con cierta velocidad y no poder frenar, esto expondría tu vida considerablemente, así que cuando vayas a trasladarte, presiona los frenos y asegúrate de que funcionan bien, también revisa el disco y en caso de desgaste cambia inmediatamente las pastillas de los frenos. 

El asiento 

El asiento de tu bici es lo que te brinda comodidad al hacer el recorrido y te permite tener una postura adecuada cuando manejas, por lo tanto, si sientes que se mueve, debes ajustarlo y colocarlo en una altura ideal para llegar a los pedales y mantener una postura que no afecte tu salud. 

La cadena 

Entre los componentes de una bici, una de las que se mueve constantemente y sin parar es la cadena, por lo que esta debe estar en condiciones óptimas. Para ello, es necesario que se mantenga lubricada, así evitas mayor esfuerzo y prolongas su vida útil. 

El manillar 

Con relación al manillar de tu bici, este es el que te permite mantener el control al momento de manejar, por lo tanto, no puede tener movimientos extraños, ya que podrías caerte. Así que antes de salir asegúrate de que esté completamente nivelado con el cuadro. 

Accesorios de protección 

La protección en una ruta larga o corta es fundamental, y los accesorios deben tenerse y colocarse adecuadamente. Asimismo, en las rutas hay que llevar herramientas para ajustar o reparar alguna avería que pueda presentar la bici. 

Última revisión y ajuste 

Finalmente, luego de revisar cada uno de los componentes anteriores, debes hacer una última verificación con la finalidad de ajustar o mejorar algún detalle que se te pueda haber escapado. Esto te librará de inconvenientes y malos ratos. 

Recomendaciones antes de hacer una ruta larga

Una bici es un medio de transporte respetuoso con el medio ambiente y que procura mantener la salud de los usuarios, por lo tanto, su uso se ha ido prolongando año tras año hasta el punto de que se utilizan para hacer viajes largos. Pero es importante que antes de aventurarte tomes precauciones como las siguientes: 

• Identifica e investiga sobre el lugar a donde te vas a dirigir. 
• Planifica una hora de salida y especifica los puntos donde tomarás un descanso. 
• Asegúrate de que tienes la condición física ideal para hacer el viaje.
• Realiza el mantenimiento adecuado de tu bicicleta. 
• Aliméntate adecuadamente, mantén una correcta hidratación y lleva reservas para el camino.
• Lleva todo lo necesario para mantenerte, por ejemplo, si el lugar a donde te diriges es de clima frío, empaca un abrigo. 
• Nunca olvides tus herramientas, ya que no sabes cuándo se presentarán averías y lo mejor es estar preparado ante cualquier circunstancia.